El problema del todo distrito y que hace McCallum para ayudar

La experiencia de los estudiantes emergentes bilingües en nuestra escuela

Daniel Fuentes

Un estudiante bilingüe emergente en clase (An emergent bilingual student in class).

El comienzo del año escolar es muy emocionante para muchos estudiantes. Puedes ver a tus amigos y a tus maestros favoritos, pero para otros estudiantes es una experiencia totalmente diferente. Para un número creciente de estudiantes en McCallum el primer día de clases es una fuente de incertidumbre y ansiedad.

Para estudiante de primer año de preparatoria, Angel Mejia-Martinez, esto fue especialmente cierto. 

“Es muy difícil,” dijo Mejia-Martinez. “No puedo conocer a nadie en algunas clases y fuera de las clases. Casi todos son personas que hablan más inglés que español.” 

Mejia-Martinez es parte de un grupo creciente de bilingües emergentes en McCallum que hablan poco o nada de inglés.

Debido a los cortos del presupuesto en el distrito, estos estudiantes no tienen mucho apoyo del distrito, pero los maestros y los estudiantes han estado ayudando. Maestra de matemáticas Courtney Long, dice que es difícil romper la barrera del idioma. 

“Señalamos a los números y a la calculadora,” dijo Long. “Hablo un poco español, entonces, puedo decir “esto es dos.” Un niño usa Google translate y nosotros intentamos comunicarnos con eso, hacemos lo mejor que podemos.”  

Aunque Google translate puede ayudar, no es suficiente para completamente enseñar el contenido en inglés. Para combatir este problema, maestros en los departamentos de inglés y matemáticas han implementado programas de tutoría. Maestra en el departamento de matemáticas Angie Seckar-Martinez, ha reclutado otros estudiantes para ayudar a enseñar a los chicos. 

Una de las tutoras volundarias de Angie Seckar-Martinez, Sophia Kramer, posa para un foto. (Esme Moreno)

“Ha tenido tutores venir a ayudar durante las clases y el almuerzo,” dijo Seckar-Martinez.

Estudiante de cuarto año de preparatoria y bilingüe tutora Sophia Kramer pasa su tiempo de FIT en el salón de Seckar-Martinez, ayudando a estudiantes. Rápidamente ella notó que estos estudiantes quieren aprender, pero se abruman fácilmente cuando no entienden la materia. 

“Especialmente en matemáticas cuando no sabes lo que está pasando puedes ser muy frustrante,” dijo Kramer. “Yo sabía que esta oportunidad era muy especial.”

En el departamento de Inglés, James Hutcheson ha traído maestros jubilados de AISD para desarrollar habilidades en Inglés con sus estudiantes bilingües emergentes. 

“Sacó a los estudiantes de sus clases de AVID para tener tiempo con los tutores individualmente,” dijo Hutcheson. 

Aunque los tutores han sido un recurso útil, Hutcheson dice que lo que los estudiantes necesitan de verdad es una clase separada para aprender Inglés. 

James Hutcheson. (Esme Moreno)

“Estamos haciendo todo lo que podemos con lo que tenemos, nosotros simplemente no tenemos mucho,” dijo el.

Los estudiantes a través de McCallum han reconocido este problema y ayudan cuando pueden. En el tercer periodo de Mejia-Martinez, estudiante de primer año de preparatoria Kai Layden ha sido un significante factor para su entendimiento del contenido en la clase. El sirve como un traductor y alguien que Mejia-Martinez puede preguntar sobre la clase. 

“Él no me pregunta por mucha ayuda, pero siempre estoy allí traduciendo y aclarando” dijo Layden. “Otros hispanohablantes también ayudan.”

Otro estudiante de tercer año de preparatoria, Esteban Giraldo de Colombia, eligió venir a McCallum para mejorar su español. 

“Tengo compañeros que me ayudan mucho y los maestros también me ayudan,” dijo Giraldo. “Pero siento que tengo que tener más trabajos para mejorar mis notas y mejorar mi inglés.” 

Aunque McCallum está haciendo lo mejor que puede para acomodar a estos estudiantes, este problema está presente en todo el distrito. Las pólizas deben ser flexibles, cambiando para ayudar a los estudiantes que deben de servir. A pesar de que los sistemas parecen que están trabajando en contra de estudiantes emergentes bilingües, individuos y escuelas como McCallum están combatiendo el problema lo mejor que pueden.