Cada año todos empiezan muy emocionados con la idea de empezar de nuevo. Las resoluciones del nuevo año han existido por generaciones; algunas personas las aman, otras las odian, y a otras personas les da igual. Desde resoluciones que cambian vidas, hasta metas pequeñas como caminar más, millones hacen resoluciones cada año, y solo algunos se adhieren a ellas. Encontrar un buen balance entre metas grandes y chicas es la clave para encontrar resoluciones 

Las resoluciones del año nuevo se pueden interpretar y acatar de manera diferente dependiendo de cada persona. Existen las resoluciones radicales y las cotidianas. Generalmente las personas más jóvenes cada año eligen resoluciones con respecto a la escuela o sus actividades diarias. Mientras las personas van creciendo y madurando por medio de sus metas de vida, sus resoluciones también empiezan a madurar y a enriquecerse. Una resolución más común para una persona madura que quiere mejorar su vida, por ejemplo, es ir a la universidad, conseguir un trabajo, comprar un carro, o rentar un lugar propio para independizarse. A pesar de que nuestras resoluciones o metas pueden ser diferentes según nuestra edad o pensamiento, todas las resoluciones potencializan nuestras ganas de seguir creciendo individualmente como personas.

Muchos estudios han encontrado que resoluciones grandes a menudo son seguidas por decepción. En un estudio conducido en 2020 por YouGov, solamente 7% de adultos en los Estados Unidos logró sus últimas resoluciones del año nuevo. Una de las resoluciones más comunes era hacer ejercicio (22%) y ser feliz (20%). Solo 7% cumplieron todas sus resoluciones del año pasado, un porcentaje mucho más pequeño que el 29% tenían la esperanza que iban a lograr su nueva meta. Esto significa que una gran proporción de personas tienen buenas intenciones pero nuestra vida diaria obstruye el crecimiento personal. 

La universidad de Ohio tiene un guía para construir resoluciones, o para hacer cambios en general: 

• Las metas deben venir en un tiempo de cambio 
• Logrando tus metas no va a ser fácil 
• Pon tus metas en pasos pequeños, el progreso va a ser lento, pero con más consistencia. 
• Encuentra a personas que te motiven como amigos, maestros, familia, etc. 

Mucha gente se encuentra atrapados con resoluciones que crecen son más difícil de cumplir con más presión que sienten. Resoluciones y metas pueden ser partes importantes en cambiando una vida pero cuando presentas presión y fracaso, es demasiado difícil de cambiar. 

Entrevistamos a algunos estudiantes de la escuela, y muchos de ellos dijeron que se están preparando para ingresar a las universidades y otros dijeron que quieren cambiar sus hábitos de vida. No es fácil pero nunca es tarde para intentar algo que quieres lograr. Piensan mucho en su futuro, trabajo o proyectos que quieren hacer este año. Para alcanzar esas metas, se esfuerzan mucho y trabajan para tener un logro más y sus logros se multiplican cada día. Entre más éxito tengamos, más éxito buscamos. 

Mientras que las resoluciones del año nuevo han sido un concepto y una forma bien conocida de hacer metas para mejorarte a ti mismo, algunos piensan que son más dañinos que útiles. Cuando las personas escogen metas alcanzables para sí mismas y las siguen pueden ser beneficiosas, provocando cambio y aumenta la confianza. El número de personas que fijan metas cada año y no pueden completarlas, se sienten desanimados y piensan en hacer otra resolución para el nuevo año que podrían fracasar otra vez.

La maestra de japonés Akemi Bond piensa que las resoluciones pueden ser beneficiosas, “Creo que es útil, sin una meta no vas a llegar a ninguna parte- el objetivo es importante.” El estudiante de tercer año, Joe Angel Fuentes-Sanchez, está de acuerdo, dijo “dale tiempo para pensar en [las resoluciones] que quieres hacer antes de que termine el año y eso te ayudará a crecer.” Con todo, se trata de establecer metas manejables y alcanzables para ti mismo, porque una meta fracasada puede ser desalentador. 

Hay muchas maneras en que puedes cambiar, resoluciones pueden ser útiles a unos, o tóxicas a otros, conociéndote a ti mismo, tus límites, y tus capacidades es la parte más importante de lograr el cambio. Establece metas que sin duda puedas cumplir, y no te desanimes en el camino a lograrlo.